Me gustaría escribir algo antes de partir de aquí, otra vez.
Antes de dejar atrás este sol, esta luz.
Antes de que se apague la Catedral durante dos meses.
Antes de volver a casa.
Este último día aquí sólo, me ha hecho darme cuenta de lo que sois para mi mis gaditanis. Especialmente los cuatro que son míos.
Todavía no me he ido y ya quiero volver. Porque echo de menos esa risa aguda de fondo por doquier, ese pelo ardiente, ese duende gaditano; y esos petas, con sus litros y contigo.
Vosotros cuatro sois mi Caleta, mi Catedral, mi Palilleros y mi Puerta Tierra. Vosotros cuatro sois los monumentos más importantes de mi Cádiz.
Esos proven que dan vida, esos cafés eternos, esos "tío, pues nada, NP", esas ganas de reírnos, esas broncas, esas tardes de cartas, esos bingos improvisados, esas locuras, esas playas; esos cigarros. Si os echo de menos en tres horas aquí, no quiero imaginarme Cádiz sin vosotros. No se cómo pude hacerlo un año entero.
Nos vemos pronto. Os quiero. Salud, salud, salud...
No hay comentarios:
Publicar un comentario