Según la RAE "que por sus caracteres se aparta de los modelos representativos o de los tipos conocidos".
Soy ese que en lugar de buscar un par de calcetines iguales en el cajón de cada día se pone uno de cada tipo, los primero que pille. Ese al que no le da miedo vivir.
"Hasta aquí llego el juego" me susurra alguien que está lejos, pero a quien escucho cerca, a mi lado. Incluso a veces como si me hablara desde dentro, desde mí. De fondo alguien canta, y es una canción triste, el mismo runrún que llevo oyendo todo este tiempo. Desde que pasó, desde que todo cambió. Y el cielo, de repente un día, se tornó gris. No se concretar ni lugar, ni hora, ni deciros el porqué de esto.
Algo ocurre, y me dice que vaya con cuidado, que los finales nunca son fáciles y que los comiezos salen caros. Nadie regala nada, y siempre ponen trampa; trampa y cartón.
Volver a empezar todo esto. A la misma mierda, a la misma mentira de siempre. Con las mismas putas, con las mismas golfas. Mis putas tristes. Repetirlo todo, de cero, otra vez. Haber escrito un libro y al acabar, darte cuenta de que está en blanco, que la tinta se desvanecido y que te han vuelto a engañar. Un libro taciturno y antiquísimo que tienes que retomar. Como ayer; como lo harás mañana.
Saber que ya los malos no son los malos, y que sigue sin haber buenos. Incomprensión, duda y tedio.
Gato por liebre. Liebre por ratón.
Consuelo inútil, locura transitoria, felicidad parcial. Profunda tristeza absoluta. Descontento general.
Atípicamente debo decirles que quiero aventura y novedad. Que todo me cansa. Que todo me frena y nada me lanza. Que ni iniciativa ni novedad. Queremos cosas nuevas, personas diferentes y momentos distintos; pero seguimos yendo a los mismos lugares y seguimos haciendo lo mismo. Tener sonrisa sin felicidad.
"Me gusta la soledad de la huída".
Hoy miro al cielo, cansado y difuso, y me recuerda a alguien.
Precaución, amigo; que más sabe el diablo por zorra, que por diablo.
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